Esta raza de perro era la que solía verse cerca de personas de alto linaje, nobles o aristócratas. Se utilizaban como perros de caza, por muy difícil de creer que parezca, ya que eran excelentes perros para correr en el agua y recoger las presas que caían. De hecho, durante el siglo XV eran conocidos como perros cobradores de agua.
Se piensa que el origen de los perros french poodle es Alemania, Francia o Rusia pero no se sabe con seguridad, ya que no existen garantías de su origen en ninguno de los 3 países.
Realmente, lo que se cree firmemente es que los ancestros de los perros french poodle son los perros Barbet, raza originada en el norte de África y llevada a la Península Ibérica por los árabes durante la Edad Media. Pero fue en Alemania y Francia donde se realizaron los cruces necesarios para obtener la raza que conocemos hoy en día. La clave era obtener un ejemplar con pelaje impermeable que fuera capaz de captar las aves de caza que cayeran sobre lagos y ríos sin problema. De hecho, el término poodle viene del idioma alemán y significa “que chapotea en el agua”.
No fue hasta el siglo XVII cuando los perros french poodle se conocieron como animales de compañía.
La raza cuenta con 4 tamaños diferentes que varían en peso y tamaño: raza toy, miniatura, estándar y gigante. Pueden pesar entre los 3 y los 22 Kg así que fíjense si hay diferencia entre ellos.
– Pelaje largo y frondoso. Esta raza de perro se caracteriza por la posibilidad de poder realizarle múltiples peinados. De hecho, este tipo de pelaje le ha llevado a ser un importante participante en certámenes de belleza canina en los que los perros poodle siempre quedan en muy buen lugar. Es importante realizarles un cepillado diario para evitar enredos
– Son perros muy enérgicos y juguetones pero esto no quiere decir que no sean perros de fácil adiestramiento, más bien es todo lo contrario: son perros inteligentes y con alta capacidad receptiva.
– Son perros de tamaño pequeño aunque si es cierto que hay diferentes tipos de perros french poodle que varían según su tamaño.
– Como curiosidad, cabe mencionar la gran simpatía que sientes los perros french poodle por el agua, por lo que bañarle no resultará problemático, más bien todo lo contrario.
– Son perros con instinto cazador y muy buenos guardianes, a pesar de su tamaño.
En general, si usted está pensando en adquirir un perro french poodle, poodle o caniche puede encontrarse con cachorros con distintos comportamientos, como en cualquier raza. De usted dependerá la elección. Si quiere un perro enérgico y espabilado puede probar a agacharse y llamarlos. El primero que venga hacia usted será el más sociable y enérgico con toda seguridad.
Por otro lado, si usted busca un perro poodle guardián, será suficiente con que dé una palmada al aire o haga algún ruido estrepitoso que les asuste o altere. El primer cachorro que ladre o se muestre inquieto ante el ruido sorpresa será el cachorro con mayores dotes de guardián. Con estos trucos, usted ya sabrá decidir con qué cachorro elige quedarse.